ECOS DE POESÍA

Nieves Viesca y su buque

“Cuatromástiles”

en Madrid

En la Sala Trovador de Madrid, el pasado 6 de mayo tuvo lugar la sesión número 1753 de la Asociación de Poesía Prometeo, con la participación de José Manuel Ortega, Pepa de Castañer y como invitada especial desde Asturias, Nieves Viesca

Jose Manuel Ortega hizo una erudita disertación sobre las ediciones del insigne poeta Jorge Manrique y la rapsoda Pepa de Castañer, recordó en versos a Gabriela Mistral y Francisco de Quevedo, entre otros.

A continuación, la poeta y narradora Nieves Viesca emocionó a todos los asistentes con la sensibilidad y la hondura de sus palabras y lecturas.

Inició su intervención dedicando el poema Estaciones del Alma (publicado en Poesía Siglo XXI) a la Asociación y “muy especialmente –dijo- a Juan Ruiz de Torres y a Ángela Reyes, que tanto han contribuido a que habitara en mi palabra”.

A continuación la poetisa de Gijón invitó al nutrido público que llenaba la Sala Trovador “a un viaje de la mano de ‘Diecinueve o Veinte Líneas’, un libro nacido al calor de la poesía y al esfuerzo minimalista y de contención que me propuse -matizó– ya que el título un poco matemático del libro se debe a que las 36 historias que lo conforman todas tienen o bien 19 o bien 20  líneas”.

Nieves Viesca confesó que había sido muy dura con las palabras. “A veces yacían más letras en mi papelera que en los folios del libro que estaba creando”.

Aludió la autora al nacimiento de un ‘nuevo santoral’, con nombres propios tan pintorescos y originales como los propios personajes que pululan por su irrepetible libro: Pececita, Cojitoverde, Dragónsinfuego, Cantodegrillo, HipopótamoDo, Tea…

Se definió como una persona “muy marinera, no en vano tengo a pocos pasos de mi casa el Mar Cantábrico, un “miura” de mar” y navegó en poética maestría por Madrid con Cuatromástiles (uno de sus emblemáticos relatos con diecinueve o veinte líneas) hacia el salobre mar del merecido y unánime aplauso del reconocimiento.

Juan ARTIDIELLO



Cuatromástiles

He sido un buque agradecido. Amé a los hombres, a la carga que transportaba y al mar. Nunca sentí enfado o molestia hacia el oleaje, por incómodo que resultara el balanceo. Ahora, con vejez y cansancio, me pregunto cómo recalé en este país  llamado Desguace, donde la luz te deja anclado. Anclado cual recortes de aluminio reflejando el sol. Qué largo camino desde aquella primavera de 1958, cuando la hija del propietario me estrellara en la proa la exquisitez de una botella de Don Perignon. Ese día, el futuro de los inversores brillaba igual que mi acero en la historia del comercio marítimo. El transporte de yute y carga en general desde Dundee a la India, fue mi mayor empresa. Años más tarde el gobierno chileno me rebautizaría, usándome durante décadas como depósito flotante de carbón. He circunvalado el globo. He atravesado los océanos sin sospechar, que después de la activa flotación me llegaría el invernaje. Cuatromástiles, el irrepetible Cuatromástiles “vendido a la baja porque no sabe cuidarse”. Los mercados cambian, el hierro enmohece y no puedo cubrir  ni tan siquiera el coste del combustible que necesito para moverme. Han arrancado de mis entrañas piezas tan valiosas como un brazo, un riñón o una arteria. Y con brochas de cinco pulgadas, transformaron la herrumbre de la popa en un acuático camaleón. Esta mañana (no sé cómo decirlo) me están cortando en pequeños trozos. Soy planchas, vigas y barras angulares flotando sobre una carretilla enferma de oxidación. No sé si quiero o no quiero regresar al mar. Por un momento tengo conmigo la inmortalidad que experimentan las olas y los bancos de peces al renovarse, de forma continua, a sí mismos.

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Acerca de Nieves Viesca

Nieves Viesca poeta y narradora, nace en Gijón, ciudad donde reside. Su andadura literaria comienza en el periódico El Noroeste, desde su fundación en 1978 hasta la desaparición del mismo. Tiene publicados los libros de relato: La danza del equilibrio (1996); Metamorfosis del sentimiento (2002); Diecinueve o Veinte Líneas (2009). Figura en las Antologías: Sembrando ilusiones (2003); Tejedores de palabras (2005); Muestra Siglo XXI de Poesía en Español (2006); Tankas para la primavera (2007); XX Colección Voces Nuevas de Poesía (2007); Los mejores Bilordios de Pinón (2007) Obra Social Cajastur; Palabras con Ángel (2009). MiniAntología XXX Aniversario Fundación Prometeo, (2010).

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